REGRESÉ A LA PENUMBRA DE TU NOMBRE
-No me mates de
indiferencia,
no me mates de olvido,
quiero llegar a tu
ribera
de muerte.-
Recién ahora comienza el
poema.
Aquí estoy,/ le escribo poemas a mi
padre muerto.
-Creo que estuve haciendo
esto durante los últimos años.-
Por fin se concretó el
anhelo,/ por fin nos encontramos
tú y yo,/ hijo y padre muerto.
El miedo se ha cumplido.
Comentarios
Publicar un comentario