GOLES SON AMORES


 

No, negra, ¡vos no tenes la culpa!

La culpa es mía.

 

No estoy enojado con vos,

estoy enojado conmigo mismo.

 

No estoy disconforme con vos,

-cómo podría estarlo-,

estoy disconforme conmigo mismo.

 

Yo sé que doy para mucho más,

pero, muchas veces, -no sé porque razón-

estoy acomodado, estoy en-co-mo-de-ci-do.

 

Estoy enmohecido, paralizado.

 

Y ya no puedo echarle la culpa  a la pandemia global,

ni a mi salud mental ni espiritual.

 

Te pido disculpas, morocha.

Soy yo mismo

que me estoy fallando.

 

Como en un tango fatal

yo mismo me voy al muere

y me decepciono como en una pesadilla rocambolesca.

 

Disculpame, Morocha,

yo sé que te estoy fallando.

 

Me estoy convirtiendo en una máquina,

me estoy convirtiendo en el gran pez.

 

Así que… por eso, te pido disculpas.

¿Sigo siendo una gran promesa?

 

Pero goles son amores.

 

Ahora mismo

me voy a dormir.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Docentes: Paro y Movilización este miércoles 30 de agosto

IRRECUPERABLES

Veleidades de suicida